La Colina de la Imágenes



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martes, 16 de noviembre de 2010

Otro otoño es posible.










El manto que el otoño vierte sobre la ciudad, no solo descansa y se ensancha en los montes, en los vales, en los parques. Hay un otoño que dibuja colores, que se expande sobre los hombros y las miradas de aquellos que se deciden a dejarse tomar por él.

El otoño del que hablo, es sutil, delicado, enternecedor. Amanece si abrimos los ojos y no ponemos límites. Se instala cuando a modo de arado, labramos nuestros adentros.

Con esta intención, esta misma mañana, he hablado con mi canon y entre los dos hemos decidido tomar parte de este acontecimiento de colores y sentimientos.


Gracias a todos los componentes de este blog por vuestra invitación a participar.
Espero estar a la altura.

Publicado por Luis 

   


3 comentarios:

  1. Bueno, bueno, bueno..., menuda entrada Luis.
    Como me alegra que al fin hays podido, a base de frotar, hacer que funcione la "lampara mágica", bienvenido.
    Tu descripcion del otoño, la gráfica y la "literaria", me encanta. Es justo como lo describes, el otoño es, también, un estado de ánimo, una calma después del torbellino estival..., volver a ese disfrute interno, a esa calma..., y eso es lo que reflejan tus instantaneas.
    Yo, por lo pronto, además de alegrarme de tenerte por aqui, me quito la boina ante tu trabajo.
    Un abrazo,

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  2. Hola Luís, esta serie me sabe a ciudad, al color tan especial que tiene Madrid en otoño, a ese tiempo "perdido" entre libreros de Moyano y cacharros varios en el Rastro, al agradable sol de noviembre calentado la espalda, ... esos tiempos "muertos" que tantas pilas nos recargan ... Bienvenido de nuevo.
    un abrazo

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  3. Hola Luis.

    Me alegro de ver tu trabajo.

    Me gusta lo que muestras, por muchos motivos. Veo una narración (implícita en la serie), la cotidianeidad (no pasa nada extraordinario, en realidad así es la vida, prosaica), también la gente como elemento central.

    La narración (hay una historia) domina sobre los elementos formales, dentro de un ambiente en el que tanta importancia tiene el sujeto como el entorno (al menos así valoro yo esa deliberada forma de fundir sujeto y fondo, que se expresa en la forma de contrastar tan ligera a ambos).

    También está el otoño, en la luz y la guisa de los personajes.

    Me gusta (repito)

    Saludos Luis

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