Los últimos rayos de sol del día, la Casa de Campo en Madrid, un paseo sin más pretensiones, ... nada más relajante que un blanco y negro en un pedazo de naturaleza, de esas que aún quedan en Madrid.
Bueno en realidad lo que pasa es que es más fácil afotar por las tardes que madrugar muy de mañana, je,je,je,je ...
La luz cambia por momentos y su calidad para fotografiar es muy variable. Esa luz suele ser difícil para las formas, pero muy agradable por la temperatura de luz, casi siempre cálida.
ResponderEliminarEn esta fotografía tuya casi se puede fijar la hora, porque el sol proyecta sombras muy claras. Es, precisamente, en esas sombras, en su cesión, donde radica el encanto de esta fotografía que invita a descubrir los tonos de gris que contiene
Me gusta, Ángel
Un abrazo
Particularmente esta luz es de mis preferidas. Proyecta unas sombras alargadas preciosas, dá volumen y conserva la suficiente potencia luminica como para obtener detalle en las sombras.
ResponderEliminarEsta en particular me encanta, Angel. Será porque me recuerda aquellas partidas de poker que echabamos en los bancos de la Casa de Campo, cuidando que los grises no nos pillasen en sus patrullas a caballo. Entonces no tenia los peligros que hoy tiene.
Un abrazo,
Ya me gustaria poder hacer una foto así... la he perseguido pero nucna la he encontrado, quizás porque por aqui los bosques son de ladrillos... la luz reflejarse en los troncos desgranado texturas, y las sombras caidas a lo largo...
ResponderEliminarme parece magnifica.
un abrazo