Budapest nos recibió con lluvia y fresco, tal vez fuera como me la imaginaba, envuelta entre humedad y bruma. Sin duda es una ciudad moderna, muy al estilo de las ciudades centroeuropeas. Pest es su lado noble, con amplias calles y plagada de edificios barrocos y neoclásicos. La estación de tren del Oeste, algo alejada del centro urbano, es obra de Eiffel, y toda una gozada para el ojo del fotógrafo.
Tokina 12-24
f/4,5
1/100 seg.
ISO 125
Ángel, la edición de lujo.. te ha quedado supernitida, y ese cielo cojonudo, suerte tuviste.. en mi caso en Milán me encontré con una ola de calor africano, dicen que muy raro por allí... pero allí estaba, pero prefiero climas como este a estar continuamente enganchado a la botella de agua.
ResponderEliminarabrazos
La edición es de lujo, Ángel, excelente, desde el cielo al detalle más pequeño.
ResponderEliminarMejor que tuviérais ese clima, la luz no es mala.
Un abrazo
La luz, si señor..., esa luz difusa que tan bien trata al fotografo. Moldea suave, no dá sombras duras ni colores estridentes... justo lo que hace falta.
ResponderEliminarY fijaté, el personal siempre cree lo contrario, busca esos soles del sur y claro, pasa lo que pasa...
Me gusta, si señor..
Abrazo,
Vaya pedazo de foto de Budapest.
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