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viernes, 27 de abril de 2012
B & W
Ya habéis visto que, cuando no sé cómo titular una fotografía recurro a lo más socorrido.
Fijate lo que son las cosas, Paco. Nada mas ver esta FOTOGRAFIA que bien pudiera (para tanto gelipuertas como anda suelto por esos foros pseudo fotográficos como proliferan en la Red) pasar desapercibida y no darle transcendencia alguna. A mi me ha traído inmediatamente a la cabeza una fotografía que tengo superguardada por ahí. Tengo guardada la fotografía y el fotolito. Es una fotografía de mi madre con veinte años, con peineta y mantilla blanca y en una actitud muy parecida. Se publicó en no recuerdo que revista y mi padre compró el fotolito para que no anduviese rodando por ahí...., cosas. Es un poco esa postura -no pose- despreocupada, intima, a la que solo le falta (a eso no hemos llegado aún) ese olorcillo íntimo de MUJER, el propio de cada una de ellas. Un reto el revelar esas luces y sombras ligadas sin que ninguna compita con la otra y que, al final, transmitan juntas esa sensación de momento íntimo. Pos eso, que me gusta un casho largo. Un abrazo,
Me alegra que te guste, Antonio. A mí también, es de las últimas que he editado de las que me siento moderadamente satisfecho; te explico porqué.
El motivo no es nada espectacular, sencillo: una mujer, además, en una postura no especialmente atractiva. La edición la centré, como hago siempre, en utilizar un "lenguaje" fotográfico "mío", esto es: planos de densidad variable, contrastes que emulan la vieja fotografía permitiendo que la escala de grises sea amplia (ligeramente centrada a la izquierda del histograma para que sean densos y den ganas de "tocarlos"), buscando el foco de nitidez a áreas muy concretas, a la vez que evito que quien la vea se "distraiga" en lo innecesario, etc. Bueno muchas cosas más que me resulta más fácil hacer que describir.
Si, además, te provoca ese recuerdo afectivo mejor que mejor.
Y si, definitivamente, la red está llena de papanatas que no saben (a mi juicio) contar historia, que emplean un lenguaje lleno de efectos, poco refinado.
Recuerdo a un tonto-del-haba (que tú también conociste) que decía que lo mejor es utilizar la "ráfaga", así caerá algo. Esos son los analfabetos que hacen, eso si, fotografías sintéticas-espectaculares.
No me interesa esa fotografía, prefiero utilizar lentes manuales, despacio y sin necesidad de muchos megas, con los que tengo me sobra, jiu, jiu.
Que bien los describe Antonio, además ese gesto íntimo, si cuenta cosas. Hace tiempo que entiendo este espacio de La Colina como un refugio, al margen de tanta “prepotencia fotográfica”.
En realidad es la definición de la propia fotografía. Blanco y negro con mayúsculas, ahí es nada!!!. Que delicia de texturas y detalles en esos blancos y sin embargo los negros bien cargados, densos, táctiles.
Fijate lo que son las cosas, Paco.
ResponderEliminarNada mas ver esta FOTOGRAFIA que bien pudiera (para tanto gelipuertas como anda suelto por esos foros pseudo fotográficos como proliferan en la Red) pasar desapercibida y no darle transcendencia alguna. A mi me ha traído inmediatamente a la cabeza una fotografía que tengo superguardada por ahí. Tengo guardada la fotografía y el fotolito. Es una fotografía de mi madre con veinte años, con peineta y mantilla blanca y en una actitud muy parecida. Se publicó en no recuerdo que revista y mi padre compró el fotolito para que no anduviese rodando por ahí...., cosas.
Es un poco esa postura -no pose- despreocupada, intima, a la que solo le falta (a eso no hemos llegado aún) ese olorcillo íntimo de MUJER, el propio de cada una de ellas.
Un reto el revelar esas luces y sombras ligadas sin que ninguna compita con la otra y que, al final, transmitan juntas esa sensación de momento íntimo.
Pos eso, que me gusta un casho largo.
Un abrazo,
Me alegra que te guste, Antonio. A mí también, es de las últimas que he editado de las que me siento moderadamente satisfecho; te explico porqué.
ResponderEliminarEl motivo no es nada espectacular, sencillo: una mujer, además, en una postura no especialmente atractiva. La edición la centré, como hago siempre, en utilizar un "lenguaje" fotográfico "mío", esto es: planos de densidad variable, contrastes que emulan la vieja fotografía permitiendo que la escala de grises sea amplia (ligeramente centrada a la izquierda del histograma para que sean densos y den ganas de "tocarlos"), buscando el foco de nitidez a áreas muy concretas, a la vez que evito que quien la vea se "distraiga" en lo innecesario, etc. Bueno muchas cosas más que me resulta más fácil hacer que describir.
Si, además, te provoca ese recuerdo afectivo mejor que mejor.
Y si, definitivamente, la red está llena de papanatas que no saben (a mi juicio) contar historia, que emplean un lenguaje lleno de efectos, poco refinado.
Recuerdo a un tonto-del-haba (que tú también conociste) que decía que lo mejor es utilizar la "ráfaga", así caerá algo. Esos son los analfabetos que hacen, eso si, fotografías sintéticas-espectaculares.
No me interesa esa fotografía, prefiero utilizar lentes manuales, despacio y sin necesidad de muchos megas, con los que tengo me sobra, jiu, jiu.
Un fuerte abrazo
Que bien los describe Antonio, además ese gesto íntimo, si cuenta cosas.
ResponderEliminarHace tiempo que entiendo este espacio de La Colina como un refugio, al margen de tanta “prepotencia fotográfica”.
En realidad es la definición de la propia fotografía. Blanco y negro con mayúsculas, ahí es nada!!!. Que delicia de texturas y detalles en esos blancos y sin embargo los negros bien cargados, densos, táctiles.
Cojonuda
Un abrazo Paco
Ah!!!! por cierto….
ResponderEliminarEn eso estoy yo Paco, ¿para que lessses necesito tanto megapixeles????? (entiéndase D800 y demás)