Un café con croissant sabe mejor entre las ruinas de un templo romano. AL menos eso dicen.
Pero francamente, donde esté una buena rebanada de pan (de los de pueblo), con aceite, tomate y si se tercia una loncha de jamón ibérico, que se quite cualquier otro desayuno, por muy en palacio que lo sirvan.
24-70 mm
70 mm
f/9
1/160 seg.
ISO 100
Anduviste fino y rapido....poco mas y se te escapa la ocasion.
ResponderEliminarLuces joias, muy joias...pero las domesticaste.
No te diste cuenta que por ahi viven a otro ritmo ??? Mira para las chanclas del paisano...
Un abrazo,
No sólo a otro ritmo, Antonio, viven mejor. Pero de eso me voy dando cuenta por la mayoría de países que he visitado, lejos del "occidentalismo de primera fila". Creo que no llegamos a darnos cuenta de lo que hemos ido dejando por el camino. Total para luego caer en una crisis de tres pares de narices que nos devolverá a nuestro sitio, pero como peor. Ainsss si es que nos puede el ansia.
EliminarUn abrazo, me alegra que te guste.
Curioso, pero como dice Antonio... anduviste rapido, tanto como el camarero, dos fotos por el precio de una, la rapidez del anterior, por la modorra del que esta en el fondo.
ResponderEliminarabrazos
Me gusta especialmente la superposición de planos: el camarero (moviéndose) y la figura del fondo, a lo suyo, y todo ello en ese marco de piedra.
ResponderEliminarEstas fotografías no tienen tiempo (como parece mostrar el sujeto del fondo) y se verán con mucho agrado dentro de muchos años.
Cojonuda, Ángel.
Un abrazo