Yo debo de ser la excepcion que confirma la regla, porque si que las miro, las observo, me recreo y casi siempre suelo ver en ellas la belleza material que un dia, sin duda, tuvieron.
Esta es un homenaje a esos dias y a la belleza que retuvieron que, como dice el refrán: "...el que tuvo retuvo y guardó para la vejez" (aunque no se yo si se refería a ésto el viejo refrán)
Pero lo más llamativo, es que el envoltorio envejece, pero la forma de ser, el comportamiento en cierto casos, y de forma positiva se queda anclado en otro tiempo, no envejece... seguimos siendo y nos seguimos comportando como si fuéramos más jóvenes... parece que hay un tope de edad que define el comportamiento... me quedo con tu mirada...
ResponderEliminarun abrazo
En esta sociedad la juventud está sobrevalorada.
ResponderEliminarComo tú, yo también me gusta fotografiar a esas personas a las que, por otra parte, cada día nos acercamos más...
Me gusta la cremosidad del retrato y esa media sonrisa...
Un abrazo Antonio
Gran retrato que, junto con las reflexiones, dan qué pensar. A mí, por ejemplo se me viene a la cabeza una cosa: Aunque cada día (en el mejor de los casos) me voy acercando un día más a esas etapas de la vida, ¡¡Yo no quiero envejecer así!!
ResponderEliminarMuy buena.